Sorolla ha dicho…
La obra de un artista nos permite conocer su vida. Por ejemplo, Joaquín Sorolla ha manifestado:
“El arte no tiene relación con la fealdad o la tristeza. La luz es la vida de todo lo que toca; así que cuanta más luz haya en la pintura, más vida, más verdad, más belleza tendrá”. No es casualidad que Joaquín Sorolla sea conocido como “el pintor de la luz” La búsqueda de la vida a través de la luz fue una constante en su trabajo, a menudo impregnado del brillo de las playas y paisajes de su tierra valenciana.
No seremos Sorolla, pero podemos reflejar nuestra personalidad a través de nuestra decoración, pues hasta en el más mínimo detalle expresa algo nuestro.
Básicamente todos los espacios reflejan algo por naturaleza. Ya sea un hospital, una escuela o un cine, todos tienen elementos que especifican su propósito y la posición de quienes están en ellos.
Cualquier espacio en el que nos encontremos influye de buena o mala manera en nuestro bienestar general. Hay una larga extensión de estudios psicológicos sobre la importancia de las interacciones del individuo con el espacio y cómo cada una de ellas repercute en la salud mental de este.
Todos conocemos, por ejemplo, las estrategias realizadas por compañías como Google para enriquecer sus oficinas y aumentar la productividad de sus empleados. El diseño de interiores responde entonces a la mejora de nuestro ambiente, a la vez de ser una expresión artística.
¿Tu espacio refleja tu personalidad?
Hablemos de recursos: El color en ña decoración
He vivido 12 años en Brasil y soy fiel testigo de la influencia de los colores de la decoración en nuestro estado de ánimo. En tierra brasilera el color te acompaña permanentemente desde la exuberancia de la naturaleza y indefectiblemente ha cambiado mi manejo del color por esta experiencia. ¿Has notado la vibración de un amarillo? ¿Qué efecto tiene el azul en un espacio? ¿Y qué te provoca el rojo? ¿El verde?
Desde tiempo atrás, se ha estudiado la relación de los colores con nuestro estado de ánimo. El color es un elemento fundamental en el diseño de interiores, pues nuestra amplia percepción de tonalidades y los valores o sentimientos que identificamos en ellos, puede transformar un espacio.
Todos le damos un significado simbólico a los colores, a las diferentes variaciones en intensidad y sus posibles combinaciones. En términos generales, el color amarillo es alegre y sereno, mientras que el azul se compara con sentimientos de melancolía y tristeza. El color verde se vincula con la vida y un sentimiento de satisfacción, mientras que el color rojo es inevitablemente atractivo.
Es importante encontrar un equilibrio en los colores de nuestros espacios. No solo por su significado individual, sino buscar la armonía en su combinación. Lo mejor sobre trabajar con color en el diseño, es que se puede agregar en elementos grandes y pequeños, por lo que podemos echar a volar nuestra imaginación para su aplicación.
Hablando de la luz
La importancia de la iluminación en el estado de ánimo
Un espacio bien iluminado no es solo cuestión de evitar tropezarse con todo en casa. Dejar que la luz natural llene tu casa, dará una sensación de tranquilidad y sosiego, además de que la entrada de esta luz también implica la visión del paisaje exterior.
La luz puede transformar los colores de un diseño, crear ambientes cálidos y acogedores además de atraer la atención a los elementos favoritos de tu decoración. Existen varios efectos que podemos lograr con la luz, desde el destaque, al efecto “buen clima”.
El efecto de las pinturas contra el estrés
Otro recurso para dar personalidad a un espacio son las pinturas.
Las pinturas son la combinación perfecta del espacio, la representación auténtica de nuestra personalidad y el uso de colores. Las pinturas y los marcos decorativos son parte de las representaciones artísticas que más aportan a un espacio ya que hablan de nuestros gustos.
Agregar una selección personal de pinturas a tu espacio no solo ayuda a enriquecer el lugar con un elemento sofisticado, sino que funciona como un ejercicio de la personalidad.
No hay nada como ver día a día un cuadro que nos inspire y nos transmita emociones significativas con solo tenerlo como parte de nuestra casa. Es con detalles como este que tomamos propiedad de nuestro espacio.
Todas las personas somos susceptibles al entorno que nos rodea. Cuando comprendemos que nuestro estado de ánimo puede ser considerablemente mejorado por la decoración del hogar, entonces comprenderemos la importancia del diseño en nuestras vidas.